jueves, 24 de abril de 2014

El tiempo entre libros

Formándome como bibliotecaria:


Bien, ya han pasado casi cinco meses desde que estoy "trabajando" en una biblioteca, pongo las comillas porque no tengo exactamente un trabajo sino una beca de formación, aunque lo que hacemos, más que formarnos, es trabajar.

Desde el primer día nos dejaron a los "bibliobecarios" (tomo esta palabra tan ingeniosa prestada de una buena amiga la cual conocí por estos lares...) solos ante la adversidad, solos de cara al público, en una biblioteca primeramente desconocida, manejando un programa de gestión de biblioteca desconocido... así que al principio hubo un poco de miedo a lo desconocido, pero transcurrido los cinco meses la biblioteca se ha convertido en un lugar acogedor, algo tuyo, donde te manejas y te mueves como si estuvieras en casa, donde los libros te sonríen...

Me da pena pensar que esta experiencia tiene fecha de caducidad, solo durará un año, pero gracias a ella me doy cuenta que realmente me gusta este mundo y estar rodeada de libros 


Es tan mágico el mundo de los libros y de la sabiduría... 

Muchos de ustedes habréis relacionado muchas veces a un búho o una lechuza con la sabiduría. Nos imaginamos a un búho como un animal sabio... con gafas y leyendo, esto es debido a que este animal se le atribuye a la Diosa griega Atenea, patrona de Atenas y diosa de la Sabiduría y de la Previsión. Se dice que Atenea tiene "ojos de búho", como señal de sabiduría y perspicacia.

También se me viene otro animal a la cabeza relacionado con los libros y la sabiduría... los ratones, sí, la expresión "Ratón de biblioteca"...esos no son los bibliotecarios en sí, sino los usuarios...investigadores, que pasan horas y años de su vida "comiéndose los libros", al igual que a los roedores, les encantan. 

Esta expresión, no siempre ha sido vista como algo bueno, también tuvo un significado peyorativo, y se muestra en el cuadro "Der Bücherwuem" (El ratón de biblioteca), realizado por Carl Spitzweg, pintor y poeta alemán, en 1850. Este cuadro representa el carácter conservador e introspectivo de la Europa de finales de las guerras napoleónicas y es una burla de esta actitud mostrando a un anciano erudito y poco interesado en los asuntos del mundo.

Por seguir divagando un poco... también tenemos la imagen de un libro sobre la cabeza... para mantener equilibrio y, para ponerlo aún más difícil, un libro sobre la cabeza, y una manzana sobre el libro. 


Hablando de cabezas y manzana, también se ponen manzanas en la cabeza para probar cuan certero eres con el arco...un deporte de riesgo para aquel que pone su cabeza debajo de la manzana...

O también te puede caer una manzana en la cabeza que te haga gritar EUREKA! y desarrollar la teoría de la gravedad..


Así fue la historia de como Newton inspiró sus teorías físicas, esto está recogido en unos manuscritos sobre su biografía que se encuentran en los archivos de la Royal Society de Londres, en los cuales se cuenta la caída de la manzana como el origen de la Ley de la gravedad. Fueron escritos en 1752 por William Stukeley, el cual fue, además, testigo de sus reflexiones en torno a la teoría de la gravedad cuando ambos estaban sentados a la sombra de un manzano que Newton tenía en el jardín de su casa. 

La noción de la gravedad le vino a la mente a raíz de la caída de una manzana mientras estaba sentado en actitud contemplativa, la pregunta que se hizo fue: ¿Por qué esa manzana siempre desciende perpendicularmente hasta el suelo?

Bien, de los libros hemos pasado a las manzanas, La verdad es que la manzana es una fruta que tiene mucho de que hablar, la fruta de la discordia...
Pero también es una fruta que tiene una relación estrecha con el libro, ¿no es una típica estampa ver a alguien leyendo mientras que muerde una manzana?
Habrá que dedicarle otra entrada al blog...porque hay mucho que divagar sobre esta fruta

La sabiduría se conserva en los libros, los conocimientos se van adquiriendo a lo largo de los siglos en los libros, grandes pensadores, grandes científicos, personas con una sabiduría inmensa que descubrieron cosas que hoy día damos por conocidas de siempre, pero que no es así, que hubo alguien que pensó primero, que le puso nombre a las cosas, que inventó, descubrió, y gracias a los libros estamos en contacto con su mente y sabiduría. Un libro es la mayor fuente de conocimiento.
Y no sólo eso, un libro es magia, porque no solo hay en ellos hechos históricos ni teorías científicas, también hay libros de ficción, y al leerlos nos lleva a imaginar cosas que si no nos la describen no podemos verlas en la realidad, podemos descubrir seres fantásticos y mundos maravillosos, lugares mágicos. Leer también es una forma de soñar.
También es una vía de escape... en lugar de gritar, escribe, puedes desahogarte escribiendo, poesía y relatos, una forma de expresar tus sentimientos a través de las letras. Sólo con unas cuantas líneas basta para atravesar el alma de una persona...